El pasado martes dimos la bienvenida al Pleno a
nuestro compañero Joan Josep Llompart Pou. De nuevo nuestro grupo vuelve a
estar completo y, como siempre hasta ahora, dispuesto al trabajo.
Asistimos al que, si no recuerdo mal, ha sido uno de
los Plenos más cortos de lo que llevamos de legislatura. El debate, excepto en
un punto, fue de poca intensidad bien porque el asunto ya había sido debatido
con anterioridad o porque era unánime la postura de los tres grupos.
Se sometió a aprobación definitiva la Ordenanza
Reguladora de Instalación de Mobiliario y Cartelería de los establecimientos de
restauración. Nuestro grupo presentó varias alegaciones al texto inicial que
han sido atendidas en su mayoría. Me gustaría destacar la que tiene que ver con
la seguridad al regular el que los veladores no puedan interceder el tráfico
peatonal ni el de vehículos y que las terrazas tengan que estar protegidas en
su perímetro para seguridad de los usuarios. Igualmente fue aceptada la
alegación en la que se solicitaba que no puedan instalarse en las terrazas
elementos de audio y/o video sin previa autorización.
El voto de nuestro grupo fue favorable a la
aprobación del texto definitivo.
También se sometió a aprobación la Ordenanza de
Comercio Ambulante. Igualmente nuestro voto fue a favor.
Se aprobó la disolución, al fin, tanto de la Empresa
de Comunicación de Aracena como de la Empresa Sierra Televisión Digital. La una
por sus pérdidas y la otra por su no actividad.
El equipo de gobierno llevó también a
ratificación por el Pleno un acuerdo
adoptado por la Junta de Gobierno relacionada con una solicitud de subvención.
En el caso de que dicha subvención sea concedida, se adecuará el local,
propiedad municipal, que se encuentra justo al lado de la piscina municipal
para Centro de Atención de enfermos de Alzheimer.
Entro a comentar el punto que recogía la moción
presentada por el Grupo Socialista relacionada con la construcción del CHARE de
la Sierra.
Como era de suponer todos los grupos votamos a favor
de dicha moción. Sin embargo creemos que esta moción debiera haberse presentado
de manera conjunta también por todos los grupos. ¿Por qué? Pues porque se trata
de un asunto, la finalización de las obras del CHARE, que nos afecta a todos
como vecinos de la comarca. Y
necesitamos de la unión de todos los que la formamos. Así se lo expresamos a
nuestro alcalde que quizá desde su cargo como presidente de la Mancomunidad
debiera encabezar esta que hasta ahora parece ser “misión imposible”. Quizá ha
llegado el momento en el que debemos estar por encima de lo políticamente
correcto y luchar por el bien común. En este caso por un servicio público de
sanidad que garantice una asistencia de calidad para todos independientemente
de nuestro lugar de residencia. Y eso debe suceder a pesar de las políticas
desarrolladas tanto por el gobierno central como por el autonómico. Y es
nuestro deber recordarles a todos los que gobiernan que lo hacen por y para las
personas y su bienestar.
En el apartado de ruegos y preguntas, cosa rara,
esta vez nadie preguntó por la subestación eléctrica. Bueno, entendemos que la
pregunta sigue en el aire. Tampoco nosotros preguntamos por cuando se van a
regularizar las plazas vacantes de conserje del colegio José Nogales y del
polideportivo. También sigue en el aire. Al igual que hasta cuándo durará el
cambio “temporal” de la bibliotecaria a la taquilla de la piscina cubierta.
Agradecimos que por fin se haya atendido la demanda de dotar de mobiliario urbano el
recinto ferial y solicitamos que se instale alguna fuente en el mismo lugar.
También solicitamos la instalación de aparcamientos
para bicicletas en diferentes puntos de nuestra localidad.
Insistimos en la necesidad de seguir realizando
campañas que promuevan el comercio en la localidad.
Y puesto que en breve se realizarán las obras de
mejora del acceso a las viviendas de la calle Hortelanos, solicitamos que los
técnicos se reúnan con los vecinos antes de la realización de las mismas.
Para terminar me gustaría referirme a las jornadas
gastronómicas celebradas el pasado fin de semana en nuestra localidad. Y
entiendo que esto no pasa de ser una opinión personal, pero no sé si a los que
visitan nuestro precioso pueblo les habrá gustado disfrutar de nuestra
magnífica gastronomía en un espacio como el que ofrece el pabellón ferial: un
marco frío, impersonal, sin carácter ni alma que desde luego no dice nada de
nosotros que no se pudiera decir de cualquier localidad de este nuestro
globalizado mundo. Eso sí, la iniciativa para promocionar la gastronomía y la
restauración local merece nuestro total reconocimiento.
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