Alájar gana por segundo año consecutivo la Copa de la
Liga
Un claro 4 a
0 frente a Lo que nadie quiere con el Zamora y Pichichi también para Alájar
Javier Moya Rufino / Aracena
La Copa de la liga local de
fútbol sala de Aracena, disputada tras terminar la primera vuelta tanto de la
primera como la segunda división de dicha liga, la ha vuelto a ganar por
segundo año consecutivo el equipo de Alájar F.S.
Alájar también ganó la pasada
liga local de fútbol sala de Aracena, evento deportivo más antiguo y señero de
la Sierra, como demuestran que la juegan cada año muchos equipos de Aracena, de
diferentes pueblos de la comarca e
incluso de otras provincias cercanas.
Una liga que en las últimas
ediciones ha cambiado, notablemente, la filosofía de sus orígenes y el buen
rollo deportivo que había entonces. Siempre, unos más y otros menos, se ha
querido ganar, pero hay muchas formas de hacerlo. Incluso el nivel y calidad de
fútbol sala ha bajado también de forma considerable frente a otras prácticas. Ahora
los jugadores solo quieren ganar, como sea, y se olvidan de jugar teniendo en
cuenta que es un rato de liberación de su vida diaria y una forma de hacer
deporte sin necesidad de competir como a otras esferas. La premisa no se cumple
cuando el fútbol sala se deja a un lado, se prefiere el resultado antes que el
juego y se copia a la perfección las críticas constantes al árbitro, las quejas
a la organización y normas que aceptan cuando se inscribe un equipo en
septiembre, además de prácticas antideportivas y teatro en fútbol que tan
fácilmente vemos cada semana en la televisión con las estrellas de nuestra y
otras ligas. Una reflexión de la liga local que comparten muchos aficionados y
que en particular demuestra que cada año baje un poco el número de equipos
inscritos y las duras medidas que a veces tiene que tomar el Patronato
Municipal de deportes como responsable de esta cita. Situaciones que no son
dueñas de ningún equipo en particular sino de muchos en general.
La final acabó con un claro
resultado de 4 a
0 a favor
de Alájar frente a Lo que nadie quiere, dos equipos que optarán al final de la
liga por el título. Dejando a un lado las bajas, el conjunto cebollero quiso y
no pudo. Desde un principio y hasta el primer gol llevó la iniciativa del
juego, pero sin crear muchas ocasiones y menos de peligro. A su vez se
encontraron con un gran portero en Alájar. El conjunto ganador se limitó a
esperar, bien replegadito atrás, salir en velocidad a la contra y cansar a su
rival. Y le sirvió e incluso cada minuto que pasaba, más aún tras el primer
gol, la sensación de peligro era mayor y pudo marcar varios goles en los
últimos minutos.
El primer gol vino antes del
final de la primera parte tras un tiro lejano, un golazo. En la segunda parte
los goles fueron cayendo poco a poco a la contra, donde en el segundo quizás
Cuéllar pudo hacer algo más.
Lo que nadie quiere se ciñó casi
siempre a las mismas jugadas, abusó de jugar con Alejandro como pivote y en las
pocas veces que pudo tirar a puerta se encontró con el portero de Alájar,
Zamora del torneo a la vez (el pichichi también fue para el equipo campeón). El
equipo aracenense (donde llegaron a jugar a la vez cuatro primos hermanos) necesitó
un gol para venirse arriba y cambiar el partido, pero en deporte no valen las
hipótesis. Ahora cada fin de semana sigue la liga local con una segunda vuelta
apasionante donde parece claro que ambos equipos, junto a pocos más se jugarán
el título final.
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