La Granada de Río Tinto / SU ALCALDE PIDE AYUDA URGENTE

La Granada de Río Tinto necesita ayuda ante la alta tasa de paro y la deuda contraída por el anterior equipo de gobierno socialista

Javier Moya Rufino / Aracena

La localidad minera de La Granada de Río Tinto cuenta con grandes problemas fruto de la crisis actual y la gestión política anterior, según ha expresado el actual alcalde José Justo Martín (IU). El principal es la altísima tasa de desempleo, pero además el Ayuntamiento cuenta con una deuda por encima del presupuesto municipal de un año.

Un pueblo de unos 250 habitantes que cuenta aproximadamente con un paro de un 36% según el alcalde. El presupuesto es de 180.000 euros y la deuda presente cuando entraron en el consistorio tras las elecciones municipales de mayo del 2011 era de 200.000 euros; principalmente a proveedores (donde se ha reducido desde entonces en 10.000 euros) con Hacienda y la Seguridad Social (en ambos casos ya liquidada y con las cuentas al día).

Por todo ello el alcalde ha celebrado recientemente un encuentro con varios diputados provinciales para explicarles esta situación, proponerles proyectos e iniciativas necesarias para La Granada con el empleo como gran objetivo y conocer la nueva estructura del ente provincial. Una petición clara de ayuda para crear empleo y corregir deficiencias en el municipio.

Entre ellas la de terminar el centro de jóvenes, ahora paralizado, y cuyas obras empezaron hace cinco años. Además la eliminación de barreras arquitectónicas, crear aceras más grandes y facilitar así el paso de los peatones por el casco urbano. De hecho este pueblo no cuenta con señales de tráfico, de ahí que entre los pocos aparcamientos y la libre circulación provoca a veces una situación caótica. El alcalde también pretende el empedrado de más calles, habilitar una parcela de aparcamiento público ante la imposibilidad de hacerlo en muchas calles debido a su estrechez. Por otro lado la cubrición del polideportivo y acondicionarlo para otros eventos, junto a la reforma del colegio ante un estado lamentable, sobre todo, en el patio donde los niños en invierno llegan a casa llenos de barro.

La finca pública de la Dehesa de ValdeHiguera necesita de una nueva función y utilidad, ofreciendo el consistorio la posibilidad de fomentar allí el turismo rural. Incluso apuestan por la señalización del nacimiento del Río Tinto.